Crónica de Jose Damián PECCI Rubio
Noches del circo
Oye, que dice David que nos llevemos ropa de abrigo, que la sensación térmica es muy baja a determinadas horas…
1:15 de la noche, plaza de Oropesa, ¡un calor…! -¿Cuántos somos?- 25. Hay que parar en Ramacastañas para recoger a unos cuantos y otros tantos ya están allí…
3:00 de la madrugada, llegamos a las puertas de Gredos. La noche es perfecta, el cielo un manto estrellado y la luna nos sirve de faro y guía hacia nuestro destino. Efectivamente, hace frío, así qué, bien abrigados.
Partimos desde la plataforma, equipados con todo lo necesario, pero sobre todo cargados de ilusión y muchas ganas. Dejamos de ser conocidos y amigos, para convertirnos en compañeros, en una familia de 25 montañeros y montañeras.
La noche es tan clara que permite que recorramos la mayor parte del camino con los frontales apagados. Vamos a buen ritmo, pero siempre permaneciendo unidos, somos un equipo.Paramos varias veces para disfrutar de las vistas nocturnas de Gredos. Prado de la pozas, Fuente de los Cavadores… Ahora sí que hace frío, buscamos resguardo en el Alto de los Barrerones, y disfrutamos de unas vistas espectaculares.
Comenzamos el descenso hacia la laguna, todos juntos, en orden, a veces en silencio escuchando la noche… y las historias de Meño… difícil callar a este gran hombre..
Son las 6:15 y hacemos tiempo a los pies de la Laguna. Vemos como la luna se despide y se va ocultando detrás del más grande, El Almanzor, dando paso a las primeras luces del alba… impresionante.
Ya son las 7:00, llegamos al refugio, en silencio y con hambre. Sobretodo, respetando el descanso de los que allí duermen. El desayuno, buenísimo y muy agradable.Comienza el espectáculo y empieza a amanecer, vemos como los riscos más altos empiezan a alumbrarse. Almanzor, Ameal, Galana… nos dan los buenos días.Aprovechamos para recuperar fuerzas, disfrutar de las vistas y hacer alguna foto de familia.
Las 8:00 de la mañana, las pilas cargadas, los pulmones llenos y el corazón contento, y aunque sin dormir, nos disponemos a recorrer el camino de vuelta. Para muchos ha sido todo un reto, pero sobre todo una gran experiencia.
Nos quedamos con ganas de más y esperando que llegue pronto la próxima.





